La bartolinitis comprende la inflamación de las glándulas de Bartolino, casi siempre debido a la presencia de bacterias en la entrada de la vagina. Esta afección suele producir en quienes la padecen síntomas y signos molestos, tales como fiebre, dolor al sostener relaciones sexuales y la formación de una masa sensible al tacto, en las zonas laterales de la apertura de la vagina. Afortunadamente, tales reacciones pueden ser tratadas a partir de ciertos remedios caseros para la bartolinitis, como los que mencionaremos a continuación.
Remedios caseros para la bartolinitis
Los remedios caseros para la bartolinitis son una excelente alternativa para aquellos pacientes cuyos casos no son demasiado graves y prefieren un tratamiento menos invasivo.
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Cúrcuma y aceite de coco
En caso de infección, mezclar 1 cucharada de cúrcuma en polvo y ½ cucharadita de aceite de coco y aplicar la pasta sobre la zona afectada.
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Aceite de árbol de té
Aplicar, con ayuda de un hisopo, unas gotas de aceite de árbol de té sobre la zona afectada, al menos 2 veces por día.
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Aceite de ricino
Calentar y aplicar aceite de ricino en la zona afectada para desinflamarla. En su defecto, puede aplicarse aceite de castor.
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Diente de león
Hervir durante 10 minutos 2 cucharadas de diente de león en 1 litro de agua. Una vez que entibie, beber el líquido a lo largo del día.
Otros remedios caseros para la bartolinitis
Cuando se trata de un pequeño quiste de Bartolino que no supone demasiado dolor, puede bastar con sólo realizar baños de asiento, los cuales han de favorecer el rompimiento del quiste infectado, para que éste drene por sí solo.
La manera más simple de hacerlo es sentándose en la bañera, sobre unos cuantos centímetros de agua no muy caliente como para que pueda quemar la piel. Se debe permanecer en esta posición durante 10 a 15 minutos, y el procedimiento debe repetirse al menos unas 3 o 4 veces al día.
Si bien es cierto que estos remedios caseros para la bartolinitis pueden resultar de gran ayuda para mejorar los síntomas de la afección, es importante consultar con un médico ginecólogo para evitar complicaciones.